t>
logo

5 consejos para desarrollar tus ideas

Publicidad

“Ya está todo inventado”. Escuchamos esa frase casi a diario y sin pararnos a reflexionar sobre ella, nos resignamos a creer que es cierta. Puede ser que “ya esté todo inventado”, sin embargo las ideas surgen a partir de otras ya existentes, así que siempre podemos crear o mejorar algo que ya existe. Ahora bien ¿cómo lo hacemos? Estoy segura de que ideas os sobran, lo complicado es saber extrapolarlas a la vida real.

Cuando queremos crear un proyecto a partir de una idea que hemos tenido, debemos hacernos dos preguntas. La primera está relacionada con la validez de nuestra idea ¿Es buena mi idea? ¿Resuelve algo? Si la respuesta a esta primera pregunta es negativa, simplemente desechamos nuestra idea, ya que carece de utilidad. Por el contrario, si es positiva, pasamos a la segunda pregunta: ¿Cómo puedo desarrollar mi idea? ¿Cuál es la mejor manera de hacerlo?

Pero esto no es suficiente. Muchas veces tenemos que darle una vuelta más a nuestra idea, ya que a priori podemos pensar que no tiene una aplicación real y estar equivocados.

Por eso, los expertos recomiendan utilizar este esquema:

  1. ¿Qué resuelve nuestra idea? Esta pregunta es esencial para poder desarrollar nuestro proyecto.

Toda idea debe resolver un problema. Por lo tanto, lo primero que debemos hacer es identificarlo y definirlo de la manera más clara posible. ¡Ojo! Uno de los errores más comunes a la hora de definir problemas es utilizar una única palabra dando por hecho que el resto de personas lo van a entender. Por ejemplo: “salidas profesionales” no es un problema. Para definirlo de manera correcta deberíamos decir “la falta de salidas profesionales entre adolescentes en España”. Cuanto más concreto sea, más fácil será encontrar una solución real para él.

  1. ¿Por qué es necesario llevarla a cabo? Es muy importante saber diferenciar entre “por qué” y “para qué”.

Para responder bien a esta pregunta podemos hacer un mapa de empatía, en el que definamos a una persona que sufre el problema que anteriormente hemos propuesto. También podemos intentar encontrar las causas y efectos del problema, así entenderemos mejor por qué es necesario desarrollar nuestra idea.

  1. ¿Para qué debemos llevarla a cabo? El “para qué” es el fin. ¿Qué queremos mejorar? ¿Qué queremos conseguir?
  2. ¿Cómo vamos a hacerlo? ¿Cuál es la mejor manera? No podemos empezar nuestro proyecto sin un plan de acción. ¿Qué herramientas vamos a necesitar? ¿Cuántas personas? ¿Qué medios?
  3. Pensar en una serie de objetivos es necesario por varias razones:
  • Estaremos más motivados.
  • Podremos enfocarnos en cosas concretas.
  • Una vez desarrollado nuestro proyecto, es interesante ver los objetivos que hemos cumplido. Es una forma rápida de valorar nuestro trabajo y ver si hemos conseguido lo que nos habíamos propuesto.

 

Comments are closed.